Según afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador, de a poco se está reactivando la economía, luego de la destrucción que sufrió por la pandemia. De hecho, añade que se están creando puestos de empleos formales. Para el mandatario esta luz verde indica una esperanza.
De igual manera, por lo menos el 80% de los trabajos que se fueron recuperando en estos últimos meses, luego del confinamiento son aquellos que reciben los salarios más bajos. Además, la mitad de los nuevos empleos de los que habla el presidente son eventuales.
En números, podemos afirmar que desde julio hasta noviembre del año 2020 se registraron 555.600 mil nuevos empleos formales. De estos el 41% son eventuales y el resto son trabajos permanentes.
Estas cifras no son las mejores, ya que indican que el 41% de esos empleados poseen contratos con los cuales no generan antigüedad, por ende, su jubilación se verá afectada. A esto hay que sumarle que cuando terminen ese contrato no recibirán compensación alguna.
Otros de los derechos que pierden al no poseer un contrato formal, son los siguientes: pago de utilidades de las empresas donde trabajan y tampoco tienen la posibilidad de ser parte de un sindicato para defender sus derechos.
Básicamente, estas fuentes de trabajo creadas en pandemia, son precarias, solo se benefician los empleadores y colaboran para que la inestabilidad laboral siga creciendo.
Por supuesto que estos contratos informales aparte de perjudicar a los trabajadores y sus respectivas familias, también lo hacen en la economía interna de México.
Trabajos mal pagos en México
Como mencionamos al comienzo, gran parte de los trabajadores que consiguieron un empleo en los meses de pandemia reciben un sueldo bajo (de una a seis UMAS como salario diario).
En el grupo de los sueldos bajos, el rango de quienes ganan un salario diario de tres UMAS es el más numeroso:
El 28% del total son aproximadamente 156.544 mil trabajadores, reciben un salario mensual de 7.819 pesos, menos los impuestos.
Luego se encuentran, aquellos que reciben cuatro UMAS diarios:
El 25% del total, son 136.906 personas que ganan 10.425 pesos por mes, menos los impuestos.
Los empleos creados en los meses de pandemia, perciben entre siete y 12 UMAS diarias. Por ejemplo, en este sector, los empleados ganan de 18.244 a 31.276 pesos mensuales.
Le siguen, los del rango de 13 a 19 UMAS, que reciben un sueldo que va desde los 33.883 hasta los 49.521 mil pesos al mes.
Por último, se encuentran aquellos que perciben los sueldos más altos, de 20 a 25 UMAS. Estos empleados reciben de 52.128 a 65.160 mil pesos mensuales.
Como podemos ver, la creciente situación de trabajos con contrato informal es alarmante. Esto indica que aquellos trabajadores que ya poseen un empleo, para cuidarlo acepten condiciones que no cumplen con los derechos establecidos por la ley.
Otro mal indició que arrojan las cifras, es que aquellos trabajadores (son los menos) que reciben un salario alto no percibieron aumentos significativos ni siquiera siendo profesionales.
En la actualidad este problema afecta aún más a los jóvenes que estudian para tener un futuro mejor. La mayoría de ellos consigue empleos precarios o “chambitas”, sin la esperanza de trabajar formalmente para poder jubilarse algún día, con todo lo que la ley implica.
Tiempos duros para la población mexicana
El 52.4% de las personas de México sufrieron las consecuencias de la pandemia en cuestiones financieras. Los más perjudicados fueron las personas de 26 a 45 años. Algunos de ellos perdieron el trabajo y tuvieron que vivir de los ahorros y otros tantos se tuvieron que acostumbrar a vivir con un sueldo inferior al que recibían antes del confinamiento.
Por supuesto que estas personas que se vieron afectadas por la llegada de la pandemia, no les quedo otra que buscar de alguna forma otro trabajo, con el contrato que sea.
Cuando la persona se encuentra sin trabajo, es una situación abrumadora. Muchas veces son el sostén de una familia y necesitan llevar el dinero a su casa, no tienen otra opción. Es por esto que se incrementaron las fuentes de trabajos, pero con contratos informales.